Los malaguistas no pudieron ni con los merengues ni con el colegiado Sánchez Sánchez, del colegio extremeño. Lo peor, se escapan dos puntos en plena batalla por seguir el ritmo de Castellón e Ibiza. Dioni volvió a ser el mejor Fe un equipo al que en el segundo tiempo le costó y mucho volver. Álvaro pudo poner el 0-1, pero por fortuna para los malaguistas no acertó a impactar el esférico
El Málaga se quedó sin fuerzas ante el Real Madrid Castilla (0-0). Los de Pellicer dominaron en la tempestad, pero esta vez no les dio para ver portería. Todo ello sumado al vergonzoso arbitraje de Sánchez Sánchez, que siempre barrió para los intereses merengues.
El primer tiempo fue de dominio absoluto de los de Pellicer. Que únicamente se vieron frenados por el silbato extremeño. Las amarillas a Dioni y Genaro lastraron a los blanquiazules en su intento por hincar el diente a un Castilla ordenado, que también supo defenderse a la perfección sin balón. Roberto también tuvo la suya, pero Cañizares desbarató la ocasión. Y también se pidió penalti por un clamoroso agarrón sobre Einar que el colegiado, curiosamente, no apreció.
La segunda mitad amenazaba con seguir el mismo camino. Sin embargo la juventud de los blancos permitió a los visitantes ir creciendo en el partido hasta tener la más claras. Porque Álvaro la tuvo con todo a favor, pero por fortuna para los malaguistas no acertó en el golpeo.
El descuento pudo decantar la balanza, pero a este Málaga ya no le quedaban fuerzas para ir a por el triunfo. El empate deja ahora la pelota en el tejado de Ibiza y Castellón, que pueden ampliar la brecha con los de Pellicer.