INVESTIGACIÓN | El cáncer está causado por cambios genéticos que rompen las limitaciones normales del crecimiento celular y se sabe que la obesidad y el sobrepeso aumentan el riesgo de desarrollar tumores, pero la pregunta hasta ahora era por qué sucede. Ahora, investigadores de la Universidad de Bergen, en Noruega, han demostrado que los lípidos asociados a la obesidad hacen que las células cancerosas sean más agresivas y tengan más probabilidades de formar verdaderos tumores.
En este nuevo trabajo, publicado en la revista ‘Nature Communications’, los investigadores han descubierto que el cambio del entorno que rodea a la célula cancerosa, de un cuerpo con peso normal a otro con sobrepeso u obesidad, empuja a la célula cancerosa a adaptarse. Esto permite que las células malignas formen un tumor.
«Esto significa que, incluso en ausencia de nuevas mutaciones genéticas, la obesidad aumenta el riesgo de que se formen tumores», afirma el profesor asociado Nils Halberg.
«Diseccionar científicamente cómo interactúan estas dos complicadas enfermedades ha sido extremadamente interesante y gratificante –explica–. Sobre todo porque este nuevo conocimiento permitirá a los investigadores diseñar mejores tratamientos para los pacientes obesos con cáncer».