Los jeltzales podrán reeditar la actual fórmula de Gobierno con el PSE-EE con Imanol Pradales como nuevo lehendakari. El PNV evita el ‘sorpasso’ de EH Bildu al que gana por casi 30.000 votos y con el que empata a 27 escaños
El PNV ha logrado evitar el ‘sorpasso’ de EH Bildu en las elecciones autonómicas vascas de este 21 de abril, en las que ambas formaciones se disputaban la hegemonía de Euskadi, aunque con un resultado muy ajustado. Los jeltzales han ganado a la formación soberanista por casi 30.000 votos, aunque han empatado a 27 escaños.
La formación dirigida por Andoni Ortuzar podrá, de esta forma, reeditar su alianza con el PSE-EE, que ha salido fortalecido de los comicios, al lograr 12 parlamentarios, dos más que en la anterior legislatura. Ambas formaciones podrían sumar mayoría absoluta en la Cámara.
El PNV, que ha asumido la responsabilidad de conformar Gobierno al haber vencido en votos, ha anunciado que iniciará una ronda de conversaciones con las diferentes fuerzas políticas para lograr un Ejecutivo «plural» como el resultado que ha salido de las urnas.
Los jeltzales inician ahora un nueva etapa después de haber acometido una regeneración generacional en sus candidaturas, lideradas por Imanol Pradales, que ha sustituido a Iñigo Urkullu como candidato a lehendakari y, previsiblemente, accederá a Ajuria Enea.
El cambio, un tanto arriesgado, realizado cuando el PNV se resentía en los últimos procesos electorales, a favor de una EH Bildu en alza, ha dado su resultado, ya que ha logrado vencer, aunque por la mínima, a la formación soberanista, que se ha presentado a los comicios con su ideólogo, Pello Otxandiano, como aspirante a la Lehendakaritza.
La formación jeltzale ha ganado en votos respecto a las autonómicas de 2020, en concreto 20.594, aunque ha bajado casi tres puntos y medio porcentuales, y ha perdido cuatro escaños. Hace cuatro años, con Urkullu al frente de la candidatura, logró una clara victoria al obtener 31 escaños, tres más que en los anteriores comicios de 2016. Entonces, recabó 349.429 sufragios, el 39,07% del total, y ganó en los tres territorios y en las tres capitales vascas.
En relación a las pasadas elecciones municipales de 2023, el PNV ha ganado ahora 48.207 votos. En esos comicios se hizo con 322.347 sufragios, el 32,27% de los votos, y, aunque fue el partido más votado, EH Bildu le superó en concejales.
El respaldo se redujo más en las generales del pasado año, en las que el PSE-EE ganó las elecciones en Euskadi y el PNV, como segunda fuerza, logró 277.175 votos (24,13%), aunque empató a cinco diputados tanto con los socialistas como con EH Bildu.
EL MÁS VOTADO EN TODAS LAS AUTONÓMICAS
En todas las elecciones autonómicas desde la reinstauración de la democracia, el PNV ha sido el partido más votado en Euskadi. También ha sido el que ha logrado más escaños en todas las citas electorales, salvo en 1986, cuando ganó en votos, pero en escaños lo hizo el PSE-EE. Ocurrió en unas elecciones anticipadas que se convocaron tras su escisión, y a las que se presentó ya por separado EA, el partido que constituyó el exlehendakari Carlos Garaikoetxea.
El mejor resultado de la formación jeltzale en unos comicios al Parlamento vasco fue en 2001, cuando con Juan José Ibarretxe como candidato a lehendakari y en coalición con Eusko Alkartasuna, consiguió 31 escaños y el 42,72% de los votos (604.222 sufragios).
Por contra, el peor resultado en votos y escaños fue el de 1986, año en el que el PNV bajó su representación hasta los 17 escaños, siendo superado por el PSE-EE en parlamentarios, pero no en votos, con el 23,71% de los sufragios (271.208).