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El Unicaja toca fondo ante el Prometey y se complica su camino en la BCL (70-69)

El Unicaja ahonda su crisis en Ucrania ante el Prometey (70-69) con una falta de benjamines de Carlos Suárez a falta de nueve segundos

El Unicaja ahonda su crisis en Ucrania ante el Prometey (70-69). Con Sánchez-Cañete en el banco, el equipo fue a remolque todo el partido y tuvo al final una ventaja de tres puntos cuando faltaban 30 segundos para el final. Una falta de Carlos Suárez en un triple de Dowe, y una posterior pedrada del capitán cajista, acabaron con las esperanzas de un equipo que no tiene fondo. Brizuela con 24 puntos volvió a ser el más destacado. 

Repitiendo vicios. Así arrancó Unicaja en Ucrania. La anarquía seguía apoderándose del ataque cajista y fruto de ello llegó la primera renta local y por consiguiente, el primer tiempo muerto de Sánchez-Cañete como técnico del cuadro verde (9-4, min 3). Aunque nada cambiaría. El desacierto local fue principal factor para seguir vivos en un partido que por la intensidad defensiva cajista podía haber terminado en el minuto ocho (17-14, min 10).

Bouteille se echó al equipo a la espalda anotando seis puntos consecutivos que, junto con una bombita de Brizuela, sirvió para darle la vuelta al marcador (21-22, min 13). Está sería la última acción de la mamba vasca hasta el descanso puesto que tuvo que retirarse tras doblarse el tobillo izquierdo. Esta salida dejó desconcertado al equipo, que en apenas tres minutos encajó un parcial de 9-0 (30-22, min 18). Un despropósito que se prolongó hasta el descanso (34-27).

Brizuela aseguró el tobillo y regresó a lo grande. Con dos triples acercó a los malagueños. Además las dinámicas positivas coincidían siempre con Kravic sobre el parqué (39-37, min 23). Incluso ya en el último periodo los ucranianos tuvieron una venta de doble dígito, que remontó Unicaja con un parcial de 2-13 (60-61-49, min 33).

La ventaja se mantuvo hasta el 66-69. Entonces Mooney perdió una bola que debió haber sido pie de Bilan y el ataque siguiente del Prometey acabó con 3+1 en una falta de Carlos Suárez sobre Dowe. Con el adiccional dentro, el Unicaja tuvo la última posesión. Tenía el nombre de Brizuela, pero acabó en las manos del capitán que mando una auténtica pedrada contra el tablero.

Después de un tenebroso viaje hasta Ucrania sin nisiquiera entrenador, Unicaja vuelve a Málaga con una situación más que complicada en la BCL. Una victoria y dos derrotas, con varios partidos por recuperar por parte del Prometey y el Cluj en velocidad de crucero, mucho tendrá que remar el equipo de Los Guindos para estar en el Top 8 de la Basketball Champions League.

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