Un joven acude un jueves por la tarde al local situado en el número 2 de la Avenida Blas Infante de Almería, donde inmediatamente es recibido por la persona que le abre la puerta y con la que previamente ya hablado por teléfono. Preocupado, serio y algo distraído, acepta un asiento y tras unos breves saludos se decide a hablar porque, ante todo, necesita compartir sus dificultades y sentirse acompañado. Necesita ser escuchado.
Así funciona ‘SM Escucha’, un nuevo «espacio abierto» destinado a la «escucha activa» y de carácter gratuito creado por la fundación pública andaluza Faisem en colaboración con miembros de la Universidad de Almería, el cual brinda a los jóvenes un lugar donde poder manifestar sus problemas, comprender aspectos de su vida y tratar de alcanzar alternativas ante sus necesidades a través del diálogo de cara a favorecer el bienestar de su salud mental.
«Lo que ofrecemos es que las personas que crean que necesitan hablar de sus dificultades y que le escuchen, puedan compartir esa experiencia a través de un espacio seguro», ha explicado en declaraciones a Europa Press el catedrático de Psicología de la UAL e investigador principal del proyecto, Adolfo J. Cangas, quien encabeza desde principios de marzo un dispositivo único en Andalucía que ya ha ayudado a una veintena de personas mediante estas charlas en grupo.
La experiencia se inspira, por una parte, en las ‘casas de respiro’, existentes en otros países como espacios que se ofrecen a la comunidad; y por otra parte, en la metodología del «diálogo abierto», un tipo de charla entre varias personas situadas a un mismo nivel surgida en Finlandia hace unos 40 años y reconocida por la OMS como ejemplo de buenas prácticas.
«Nosotros hemos cogido ambas experiencias y lo hemos convertido en lo que llamamos espacio abierto SM Escucha», ha detallado el investigador en relación a este dispositivo de carácter público orientado principalmente a menores de 35 años pero al que puede acudir cualquier persona sin necesidad de cita previa, dado que está abierto ininterrumpidamente de lunes a sábado, entre las 17,00 y las 22,00 horas.
‘CENTINELAS’ PARA EL ACOMPAÑAMIENTO
Para propiciar estas escuchas, el dispositivo cuenta con dos trabajadores de Faisem así como con un nutrido y variado grupo de unos 15 ‘centinelas’, es decir, voluntarios de diferentes perfiles profesionales, estudiantes y personas que han pasado por problemas de salud mental que mensualmente se forman en diálogo abierto de la mano de una psicóloga clínica del hospital Príncipe de Asturias de Alcalá de Henares (Madrid) y que colaboran también en las actividades del centro.
Su papel pasa por el acompañamiento de quienes acuden a las reuniones, en las que se pretende una participación colectiva con todos sus miembros mediante la conversación proactiva, sin que nadie ocupe un rol predominante y para las que, normalmente, se invita a las personas que acuden a que vayan acompañados también por alguien de su entorno.
«Nosotros escuchamos, pero no le decimos a nadie qué es lo que tiene que hacer. Cada uno en su escucha va a intentar darse cuenta de cuál es puede ser su solución o va a buscar su camino, cuál puede ser su escapatoria», explica Coco Soriano, responsable del programa de soporte diurno de Faisem en Almería, quien incide en que todos los miembros del grupo tienen oportunidad de hablar y de ser escuchados.
La iniciativa se apoya además en las redes sociales, a través de un blog y una activa cuenta en Instagram (@smescucha) mediante la que se puede contactar con el espacio abierto y en la que también se promocionan todo tipo de talleres que abarcan la producción de música urbana, el pódcast, deportes como el pickleball, el teatro, el collage o cursos de entrenamiento canino, entre otros.
«Hay personas que viene y están toda la tarde como si fuera un club social con juegos de mesa y un futbolín. Se puede salir al jardín y estar conversando todo el tiempo uno quiera», han detallado ambos responsables en relación a las facilidades que se ofrecen a los posibles usuarios.
PREVENCIÓN DESDE EDADES TEMPRANAS
La iniciativa pretende acercarse a la población juvenil, ya que «son los que ahora mismo tienen más dificultades en salud mental y menos recursos para buscar ayuda ante sus problemas», aunque también se busca la «prevención» de patologías mentales al abordar obstáculos antes de que los problemas se «cronifiquen» y puedan desembocar en enfermedades. «Está demostrado que la prevención es lo más eficaz en salud mental», ha aseverado Cangas al respecto.
«Muchos jóvenes se encierran y no manifiestan que necesitan ser atendidos de alguna manera o cuando empiezan a sentirse diferentes, ya sea por vergüenza o porque creen que los van a juzgar. Aquí no se juzga a nadie por lo que cuente, les atendemos siempre desde una escucha que se hace en horizontal», ha detallado por su parte Soriano.
Los expertos coinciden en que a raíz de la pandemia de covid-19 y debido al aislamiento social, el cuidado de la salud mental es un aspecto que los jóvenes tiene mucho más en cuenta y abordan con mayor naturalidad a la hora de identificarlos, toda vez que empresas e instituciones también apuesta por programas de sensibilización, si bien la exclusión social «aún existe» porque «no se está integrando a las personas».
Así, aseguran que han experimentado una mayor demanda por parte de los centros educativos, donde los profesores han identificado problemas de salud mental entre sus alumnos que no saben muy bien cómo abordar. «El problema estaba ahí, pero la pandemia lo ha puesto en primer plano y nos ha hecho ver que no somos tan invulnerables», reflexiona el coordinador del espacio abierto.