Erik Lamela aterrizó hace tres temporadas en Nervión. Llegó procedente del Tottenham, de la Premier League, en una operación en la que estuvo incluida la marcha de Bryan Gil y a la que se le sumó una cantidad de dinero que rondó los 20 millones de euros. El argentino ha cosechado tres temporadas en las que su protagonismo en el equipo ha ido variando, pero en las que ha conseguido levantar un título de la Europa League con el Sevilla FC. Lamela dice adiós al
Lamela dice adiós al Sevilla FC
El argentino, tras tres años defendiendo la camiseta sevillista, se marcha del club. El atacante ha disputado un total de 92 partidos, repartidos entre todas las competiciones. A esos números, se le suman los 16 tantos anotados, con especial recuerdo para la afición del Sevilla aquel gol en semifinales de la última Europa League conseguida por los hispalenses la temporada pasada, ante la Juventus de Turín. Un gol que significó la clasificación de los suyos para la final en Budapest y que llenó de júbilo al Ramón Sánchez-Pizjuán en lo que fue una noche mágica para los, entonces, pupilos de José Luis Mendilibar.
Lamela se despedirá del equipo en el día de hoy en un acto que tendrá lugar en el Ramón Sánchez-Pizjuán. El curso en el que más peso tuvo dentro del equipo fue el pasado. Bajo los mandos de hasta tres entrenadores, Lopetegui, Sampaoli y Mendilibar, el argentino tuvo un importante número de minutos. Hasta 49 partidos fueron los que disputó el año pasado Erik en la que, sin duda, fue la mejor temporada en Sevilla. A sus 32 años se marcha de la capital hispalense, pero aún se desconoce el equipo al que partirá. Una nueva baja confirmada para un Sevilla que tendrá que trabajar mucho en la dirección deportiva este verano, para poder darle la vuelta a una situación delicada en la entidad nervionense.
