Jerez de la Frontera vivió este domingo una procesión del Santísimo por las calles del centro de la ciudad, con un recorrido diferente al habitual tomando por el entorno de San Miguel y el Conjunto Monumental del Alcázar.
El repique de las campanas marcó el inicio de la misa solemne en la Catedral. El Obispo recordó a los fieles la importancia de esta festividad, que celebra la presencia real de Cristo en la Eucaristía.
La custodia que tallara Manuel Gabella Baeza salía de la Catedral jerezana para tomar las calles aledañas a la plaza del Arenal, que el itinerario era una de las grandes novedades de este año. Siendo la pregunta más repetida conocer el motivo de no pasar por la calle Larga.
Tras tomar por la plaza del Arenal, las representaciones de las Hermandades jerezanas buscaban el entorno del Alcázar para pasar por las alfombras de sal que fabricaron los jóvenes cofrades la noche de este sábado. Más de 200 metros, 40 alfombras y varias toneladas de sal tiñeron el entorno de la Alameda Vieja para engalanar el paso del Cuerpo de Cristo. Eso sí, lejos quedan las tardes de Corpus en Jerez con altares y traslados.
Destacar el altar montado por las Hermandades de Loreto y Transporte con el niño Jesús de la Patrona de Jerez y los instalados por la Agrupación Parroquial de la Humildad de Barbadillo o la Pastora de San Dionisio.
Una procesión de Corpus que se salvó de las altas temperaturas, que finalizó en San Miguel y que no tomó por calle Larga.