Concluye este lunes el plazo para la moción de censura al alcalde de Sevilla ya descartada y el martes queda aprobado el presupuesto.
Este lunes 8 de julio expira el plazo de un mes habilitado en el Ayuntamiento de Sevilla merced a la Ley de Régimen Electoral General, para que las fuerzas de oposición, en este caso el PSOE, Vox y Podemos-IU, presentasen una moción de censura ya descartada por tales grupos; en el marco del mecanismo desencadenado al rechazar el pleno municipal el pasado 7 de junio, con los votos contrarios de tales fuerzas de oposición, la cuestión de confianza planteada por el alcalde, el popular José Luis Sanz, vinculada a la aprobación de su proyecto presupuestario municipal.
Aquel pleno se celebraba en un marco en el que los populares, que gobiernan en solitario y minoría con 14 concejales de un total de 31; vienen gestionando los presupuestos prorrogados de 2023, diseñados por el anterior Gobierno local del PSOE, acometiendo modificaciones presupuestarias de gran envergadura; al no haber cosechado ningún apoyo o abstención entre la oposición para aprobar sus propias cuentas.
Concluye este lunes el plazo para la moción de censura al alcalde de Sevilla ya descartada
Tras meses en esta situación, el alcalde anunciaba su decisión de elevar finalmente al pleno su proyecto presupuestario, con el planteamiento de recurrir al mecanismo de la cuestión de confianza en caso de que no prosperasen sus nuevas cuentas, como así sucedió en el pleno extraordinario promovido para las nuevas cuentas, cuando la Corporación local tumbó los presupuestos del PP con el voto contrario en bloque de toda la oposición. Fue entonces, así, cuando el alcalde convocó un nuevo pleno extraordinario, pero esta vez para su cuestión de confianza ligada al presupuesto.
Y tras no prosperar aquel 7 de junio en el pleno la cuestión de confianza vinculada al presupuesto, al votar en contra toda la oposición, se abría entonces un plazo de un mes en el que los grupos de oposición pueden presentar una moción de censura contra el primer edil popular, para su relevo por un candidato, extremo que han descartado ya insistentemente tanto el PSOE, como Vox y los ediles de Podemos e IU.