Dos días antes de lo previsto inicialmente se ha reabierto al tráfico la carretera provincial CA-3110, en Jerez de la Frontera, donde la Diputación de Cádiz ha ejecutado tareas de mejora para evitar inundaciones como consecuencia de las lluvias y crecidas del río Guadalete.
Los trabajos en esta vía, por la que se accede a la entidad local autónoma de Torrecera y que atraviesa las barriadas rurales de La Ina y Rajamancera, todas ellas en el término municipal de Jerez, obligaron al corte de la citada vía el pasado 5 de agosto y al desvío alternativo del tráfico a otras carreteras provinciales, como ha recordado la Diputación en una nota.
La intervención, en la que se han invertido más de 400.000 euros, ha consistido en aumentar la rasante entre los puntos kilómetros 2,8 y 3,8 al objeto de evitar las inundaciones que se producen cuando se registran fuertes lluvias en la zona. La actuación también incluye la mejora del talud del margen derecho, la sustitución de dos sistemas de drenaje transversal, la formación de cunetas longitudinales y nuevos pasos salvacunetas.
El plazo de ejecución de esta obra, tal y como se anunció al informar de la misma, era hasta el 29 de agosto. Sin embargo, el equipo que ha llevado a cabo las tareas ha terminado los trabajos antes de lo previsto, por lo que la Diputación ha podido hacer las gestiones necesarias para restablecer el tráfico en este tramo.
La reapertura de la circulación ha sido comunicada tanto a la Dirección General de Tráfico, como a los servicios de emergencias y las poblaciones cercanas.
Para culminar la intervención quedan algunas tareas en la zona de los márgenes, con remates de obras de fábrica, así como colocar algunas señales y biondas. No obstante, ha asegurado la Diputación, esas labores no influyen en el tráfico rodado.
Esta actuación está programada en el Plan de Carreteras de Diputación 2021-2023, del que se hace cargo el Área de Cooperación.