La Guardia Civil ha detenido a tres personas, entre ellas un agente de la Policía Nacional destinado en El Ejido, como presuntos implicados en la muerte violenta de un médico en Aguadulce, en Roquetas de Mar (Almería), a finales del pasado mes de agosto.
Fuentes de la investigación han confirmado a Europa Press la condición de agente policial de uno de los detenidos, toda vez que la Guardia Civil, en una nota, ha explicado que dos de los arrestados por el homicidio han ingresado en prisión mientras que un tercero ha quedado como investigado. Las detenciones se han producido en León, Almería y Roquetas de Mar.
Fue sobre las 9,40 horas del domingo, 25 de agosto, cuando un vecino alertó a emergencias de que llevaba dos días sin ver al referido facultativo, identificado como Rafael Piorno Fermoselle, y que en la puerta de su domicilio, ubicado en la calle Enrique Granados de Aguadulce, había restos de sangre.
La operación ‘Alhabana’ culminó el pasado día 17 de septiembre, unas tres semanas después del hallazgo del cuerpo sin vida del doctor con evidentes signos de violencia en su domicilio de Aguadulce, donde también pasaba consulta, en el que habría aparecido maniatado y con algunas puñaladas.
Desde la Guardia Civil se confirmó desde el primer momento la muerte violenta Rafael Piorno Fermoselle, conocido además porque en las pasadas elecciones municipales de mayo de 2023 concurrió en la lista del PP al Ayuntamiento de Roquetas de Mar desde el número 21, sin llegar a conseguir acta.
Las primeras pesquisas apuntaban a que la víctima, que habría fallecido el 23 de agosto, podría tener algún vínculo o guardar alguna relación con los posibles responsables, según el estudio del lugar del crimen por parte de los especialistas de criminalística de Policía Judicial.
Así, todas las actuaciones se centraron en localizar a las personas vinculadas a la vivienda y al propio fallecido. Debido a la amplia red de contactos que mantenía en su entorno personal y profesional, la investigación «requirió un gran esfuerzo y un exhaustivo análisis».
La investigación ha permitido constatar que uno de los detenidos «conocía, de manera directa, al fallecido», lo que le permitió «conocer sus rutinas y horarios». Esta información le proporcionó información suficiente y necesaria para «planear su acción contra la víctima, con las consecuencias finales del hecho» que, según ha avanzado Onda Cero, estaría relacionado con un robo con violencia.
Otro de los detenidos se habría desplazado desde León expresamente para actuar en la vivienda donde ocurrieron los hechos en coordinación con otro de los detenidos. Ambos eran conocedores de las medidas de seguridad que debían adoptar para no ser localizados antes y después de los hechos.
Mediante diversas coartadas «trataron de aproximarse a la víctima con la intención de ganarse su confianza y así llevar a cabo sus intenciones». Los dos presuntos autores trataron de borrar cualquier rastro del lugar que los vinculase con el fallecido.
En el marco del caso, se han practicado registros en los domicilios de los presuntos autores en las localidades de León y Aguadulce-Roquetas de Mar, sí como en un local de la ciudad de Almería arrendado por uno de los detenidos, donde se han localizado diferentes efectos relacionados con los hechos.
Las diligencias judiciales han sido trasladadas al Juzgado de Instrucción número 1 de Roquetas de Mar (Almería), que ha decretado el ingreso en prisión para dos de los detenidos tras su puesta a disposición judicial y la condición de investigado para la tercera persona detenida.
