Después de ir todo el partido por delante, con rentas de hasta 15 puntos, los de Ibon Navarro sucumbieron ante un peleón y físico UCAM Murcia (87-88). La casta de Alberto y los puntos de un Brizuela irregular, lo más destacado. Camerón Oliver eligió un mal día para debutar.
El partido comenzó con Alberto Díaz y Mooney monopolizando las acciones ofensivas cajistas para lanzar a los de Ibon en el electrónico (18-7, min 6). El 5/6 desde más de 6,75, con dos de ellos de Francis Alonso, amplió la diferencia al final de un completo cuarto del Unicaja en el que todos estuvieron acertados (30-18, min 10).
El segundo acto fue el momento elegido por Ibon para el debut de Camerón Oliver con la casaca malagueña. Esta puesta en escena coincidió con un parcial de 2-8 a favor del UCAM con Davis como estandarte (32-26, min 13). Tuvo que ser Axel Bouteille el que activase a los cajistas con un triple que devolvió la diferencia a los dobles dígitos (39-29, min 15). Una renta que no pudieron mantener los malagueños al descanso por el acierto de McFadden y Rojas (49-42, min 20).
El paso por vestuarios trajo un intercambio de canastas con Brizuela al mando de las operaciones malagueñas (60-52, min 24). Y es que la Mamba Vasca fue el único que aguantó las embestidas pimentoneras, que dejaron la brecha en cuatro puntos para que fuese el último periodo el que dictase sentencia (67-63, min 30).
Los murcianos se pusieron por delante con un excelso arranque de último cuarto (71-72 min 31). Pero un espectacular Alberto Díaz, escoltado por Kravic, con dos robos volvió a poner al Unicaja en ventaja (75-72 min 33). Los rebotes ofensivos costaban un quintal y ahí el Murcia estuvo más atinado (83-86, min 37). En el toma y daca MaCfaden anotó la canasta de la victoria desde más de 6,75, para un definitivo 87-89.
El Unicaja sucumbe por tanto ante el acierto y la capacidad de sufrimiento del equipo pimentonero. Además esta derrota deja in bagaje negativo para Ibon Navarro, con un triunfo y dos caídas en tres partidos.