El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, ha señalado que el crecimiento de la incidencia de COVID por cada 100.000 habitantes en dos semanas «se ha frenado» en la ciudad y la cifra de hospitalizaciones, «que no está generando presión en los centros sanitarios, se ha estabilizado». No obstante, ha incidido en que «debemos seguir cumpliendo las normas y atender las recomendaciones para dejar atrás la pandemia».
Buenos días. El crecimiento de la incidencia se ha frenado, y la cifra de hospitalizaciones, que no está generando presión en los centros sanitarios, se ha estabilizado. Pero debemos seguir cumpliendo las normas y atender las recomendaciones para dejar atrás la pandemia. pic.twitter.com/c4YyKrbPRQ
— Paco de la Torre (@pacodelatorrep) May 8, 2022
Así, en su mensaje de los domingos desde que se iniciara la pandemia hace más de dos años, el regidor malagueño ha explicado que la incidencia acumulada en dos semanas por cada 100.000 habitantes en la ciudad de Málaga este pasado 6 de mayo era de 428,4, que «comparada con siete días antes, el día 29 de abril, había subido 12».
Al respecto, ha agregado que «si recordamos los datos de la pasada semana había una subida de 58,7 en el mismo periodo de tiempo», por lo que «vemos que hay un freno en ese crecimiento de incidencia que teníamos en los últimos días».
En paralelo, ha continuado, la cifra de hospitalizaciones está estabilizada. «Si la anterior semana daba un resultado de 100, la del 29 de abril al 6 de mayo son 96 los datos oficiales dados por la Junta».
«No hay presión hospitalaria, la sensación de los responsables de los hospitales es que no existe presión aunque esos números aparentemente sean más altos de los que había unas semanas atrás», ha detallado.
De la Torre ha insistido, por tanto, en que «debemos ser cumplidores de las normas» en cuanto a la utilización de la mascarilla en espacios sanitarios o en residencias de la tercera edad.
Asimismo, ha dicho también que el uso de la mascarilla «va a depender de la situación de cada uno, psicológicamente, de querer o no llevarla, se sienta más o menos seguro o si en su entorno familiar tiene una persona con situación que podemos decir con inmunodeficiencia o riesgo por ser muy mayor, que haga prudente ir con mascarilla para proteger a esa persona», agradeciendo, por último, el esfuerzo de todos.