CSIF ha criticado este martes que Correos no ha contratado «suficientes refuerzos» en Andalucía para la campaña de Navidad, que comenzó el 1 de diciembre y concluirá el día 31, «a pesar de tratarse de la época del año con mayor carga de trabajo».
Según los datos del sindicato, las incorporaciones han sido sólo 870, lo que supone un 59,7% menos que las 2.160 que llegaron en 2020. A esta drástica reducción, CSIF le suma la «insignificante» subida de 1,46 euros en la gratificación fija que recibirán los empleados en concepto de mayor productividad, que ha definido como «miseria».
La organización sindical ha señalado a través de un comunicado que los recortes, «que convierten esta campaña navideña en la de menos contratación de la historia en Andalucía», han sido «muy llamativos» en las provincias de Sevilla, con un 75,3% menos de refuerzos (de los 840 del año pasado a los 207 de 2021); Jaén, con un 67,5% (de 160 a 52); Córdoba, con un 60,9% (de 205 a 80); Granada, con un 58,5% (de 193 a 80); y Málaga, con un 54,5% (de 455 a 207). Almería ha perdido un 36,1% (de 83 a 53); Cádiz, un 17,2% (de 162 a 134); y Huelva, el 8% (de 62 a 57).
Según la presidenta del sector de entidades públicas estatales, Dolores Carrión, los datos de Sevilla, Málaga y Granada son «más hirientes porque allí hay tres grandes centros de tratamiento postal donde se clasifica y se encamina la paquetería y correspondencia de toda Andalucía, tanto la que entra como la que sale, con turnos de trabajo de veinticuatro horas». CSIF ha recalcado que la disminución de recursos humanos en general en toda la comunidad «choca con las necesidades reales del servicio».
La responsable de CSIF ha asegurado que Correos «ha perdido una nueva oportunidad de mejorar las cosas» y ha pronosticado que «el personal tendrá que hacer un doble esfuerzo y afrontar ritmos inasumibles de trabajo a cambio de una miseria». En concreto, la gratificación pasa de 101,38 a 102,84 euros, lo que supone un aumento del 1,4% que «riñe totalmente con lo que ha subido la vida y con la petición del sindicato, que exigió llevarla a los 120 euros», ha explicado Carrión.
Además de la gran diferencia entre los refuerzos de un año y otro, CSIF-A ha lamentado que casi un tercio de esos contratos temporales, en concreto el 28%, sean por jornadas de cinco horas. «Con esta invasión de contratos a tiempo parcial manifiesta y desesperante, el personal seguirá desbordado, sin posibilidad de cubrir bajas ni permisos», ha apostillado Carrión, recalcando «la presión crónica e innecesaria en una empresa pública que padecen sus trabajadores».
«Lo que está pasando no es justo, los empleados no dan abasto y aun así sacan adelante un servicio que siempre ha sido esencial, más incluso desde que estamos en pandemia», ha añadido.
El sindicato también ha reclamado que se firme un plan estratégico para la viabilidad de la empresa, que en la comunidad cuenta con unos 8.000 trabajadores, entre otros motivos para acabar con una tasa de temporalidad que supera el 30%. «Aquí no se contrata a casi nadie», ha recalcado, advirtiendo que «el número de jubilaciones y empleados que se marchan a otras administraciones no se detiene y sus plazas no se cubren».
Por último, Carrión ha mostrado su temor por el perjuicio que sufrirá la ciudadanía cuando llegue el pico más alto de esta campaña de Navidad, que tradicionalmente se sitúa después del puente de la Constitución.
