La Hermandad de la Macarena, en cuya Basílica reposan los restos del general golpista Gonzalo Queipo de Llano, ha «reiterado» este jueves su «voluntad de cumplir escrupulosamente, tal y como ha venido haciéndolo, la legislación vigente», respondiendo así a las declaraciones del ministro para la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Félix Bolaños.
El ministro ha confirmado en una entrevista en la SER recogida por Europa Press que el Gobierno iniciará el procedimiento administrativo para sacar a Queipo de la Macarena en cuanto la Ley de Memoria Democrática, aprobada definitivamente este pasado miércoles en el Senado, entre en vigor. «En virtud de esta disposición y respeto a las leyes de un Estado democrático, la Hermandad de la Macarena actuará en cada momento según indique la legislación que le afecte», ha apostillado la entidad en una declaración remitida a Europa Press.
«Se les ha de dar una sepultura digna, donde las familias decidan, pero no pueden estar en un lugar preminente porque eso es una especie de homenaje a los protagonistas de la Dictadura», ha argumentado Bolaños, que ha insistido en que, en cuanto entre en vigor la Ley, se pondrá en marcha el procedimiento administrativo que culmine con la salida de Queipo de Llano de la Macarena, entre otros personajes del Franquismo, como es el caso también de José Antonio Primo de Rivera.
Sobre el caso particular de Queipo de Llano, la Hermandad de la Macarena ya manifestó que cumpliría lo que recogiera la Ley Nacional de Memoria Histórica. Igualmente, el Pleno del Ayuntamiento de Sevilla aprobó en julio de 2016, con la abstención de Cs y el voto contrario del PP, reclamar que la Macarena dejara de acoger la tumba del general golpista. Por parte de la Junta de Andalucía, la anterior consejera de Cultura, Patricia del Pozo, insistió en que para «solucionar» el caso de Queipo de Llano en la Macarena era necesario un «desarrollo reglamentario de la vigente Ley Andaluza de Memoria Histórica y Democrática».
La Hermandad de la Macarena viene defendiendo que el columbario proyectado en la Basílica «podría suponer en un futuro una posible vía de solución» al enterramiento del general golpista si así lo aceptase la familia del mismo, avisando, además, de que con la Ley Andaluza de Memoria Histórica tal como está «dictada», sin un «reglamento que la perfeccione», no pesa sobre la hermandad «ninguna obligación de sacar» como tal los restos del militar.