Andalucía ha recibido el reconocimiento de la Fundación Economía y Salud a las buenas prácticas por los «avances en vigilancia epidemiológica, medidas preventivas y asistencia sanitaria en centros residenciales y centros escolares en Andalucía durante la pandemia Covid-19».
En el acto de entrega de este reconocimiento estuvo presente la subdirectora de Gestión Sanitaria del Servicio Andaluz (SAS), Inmaculada Mesa, según han informado este viernes la Consejería de Salud y Consumo y la Fundación Economía y Salud en una nota.
La Fundación Economía y Salud presentó los resultados del ‘Estudio para la evaluación y mejora de los servicios de salud’ en España, con el grado de implantación de distintas medidas en los diferentes sistemas de gestión de la salud del territorio nacional a través de comunidades autónomas, lo que supone un diagnóstico completo del sector salud.
En concreto, de Andalucía se puso en valor su trabajo en la vigilancia, prevención y asistencia durante la pandemia, tanto en centros residenciales como escolares, en el que ha tenido una «importancia vital» el papel de la Enfermería, según han abundado la Junta y la fundación en su comunicado.
Al respecto, desde el Gobierno andaluz han remarcado que, durante la pandemia por la Covid-19, la Consejería de Salud y Consumo implementó un sistema de seguimiento, prevención y apoyo para las personas atendidas en los centros residenciales.
El objetivo, según la Junta, ha sido «en todo momento mantener un seguimiento de personas en situaciones crónicas de mayor complejidad y situaciones de vulnerabilidad relacionadas con la dependencia para prevenir el agravamiento de problemas de salud previos y garantizar la no aparición de problemas colaterales, así como prevenir la aparición y/o extensión de brotes epidémicos y el seguimiento de casos y sospecha de casos de personas afectadas con SARS-CoV-2 en estos centros».
Las enfermeras gestoras de casos en las residencias, junto con los equipos de Atención Primaria, realizaron el seguimiento sanitario proactivo –telefónico y/o presencial– a 1.107 centros sociosanitarios de diferentes tipologías, fundamentalmente de personas mayores y con discapacidad.
Además de este seguimiento, se realizaron intervenciones relacionadas con la coordinación de los diferentes profesionales y equipos, sectorización de residencias para prevenir la propagación del virus en colaboración con los profesionales de Salud Pública, medicalización de centros, traslados a espacios habilitados para uso sanitario de aquellos centros residenciales que, «por razones estructurales, falta de personal o necesidad de abordaje clínico diferenciado lo han precisado», prevención y detección de infección por Covid 19 mediante la realización de cribados continuados para personas trabajadoras y/o residentes, notificación de casos y brotes a Epidemiología, vacunación de personas residentes y trabajadoras sociosanitarias, formación para profesionales de los centros residenciales y centros sociosanitarios para el desarrollo de medidas de prevención y manejo del Covid-19.
Por su parte, las enfermeras referentes de centros educativos han dado soporte a cerca de 8.000 centros educativos entre públicos, concertados y privados de Andalucía y a 1.800.000 estudiantes aproximadamente, desde las escuelas infantiles y Primaria hasta institutos de Enseñanza Secundaria, bachilleratos y asimilados, incluyendo la totalidad de centros educativos que comprendan formación desde la infancia a la adolescencia, excluyendo la formación universitaria.
En un primer momento, la labor de las enfermeras escolares fue poner en marcha las medidas sanitarias oficiales para prevenir y prestar asistencia a los brotes que pudieran producirse en el ámbito escolar.
Mediante el asesoramiento y la información, realizaban intervenciones de vigilancia, seguimiento y atención en los centros y llegado el momento gestionaron la vacunación contra la Covid-19 al profesorado y al alumnado.
Además de estas funciones, y tras la pandemia, realizan, entras otras, intervenciones como impulsar la promoción de la salud y la prevención de la enfermedad, gestión de casos en el alumnado con problemas de salud, coordinar actividades formativas con los equipos docentes, facilitar asesoramiento y formación, coordinar el cumplimiento del calendario vacunal, entre otras, según han detallado la Consejería que dirige Catalina García y la Fundación Economía y Salud.