Declarada de Interés Turístico por la Diputación Provincial de Málaga. Antes de visitar esta Fiesta Singular consulte la fecha con el Ayuntamiento o con la Oficina Municipal de Turismo de la localidad.
El interior de la provincia de Málaga es conocido desde el punto de vista gastronómico por mantener sus señas de identidad. El aceite de oliva o el vino son algunos de los productos que más se reivindican en los últimos tiempos, aunque dejan hueco a los productos derivados del cerdo, que desde hace siglos han formado parte de las despensas de los pueblos malagueños. Desde hace más de una década, la villa de Ardales, situada en el Valle del Guadalteba, ha querido sin complejos homenajear la elaboración tradicional de embutidos y carnes porcinas con una jornada conocida como la Fiesta de la Matanza.
Este evento lleva a la práctica el conocido dicho que “del cerdo se aprovecha todo”, resumiendo la filosofía que estaba detrás de las tradicionales matanzas caseras.
En este día se puede observar como se elaboraban antiguamente las chacinas y otros derivados cárnicos. Para ello, mujeres del pueblo recrean con utensilios de otras épocas los métodos tradicionales para elaborar embutidos.
Una forma práctica y suculenta de acercarse a los sabores porcinos, es la degustación de miles de panecillos con salchichón, chorizo o morcilla. Esto es sólo el aperitivo, ya que en la plaza se preparará carne en salsa al puro estilo ardaleño. Los vecinos de allí aseguran que este estofado de cerdo tiene en su elaboración un secreto que muy pocos conocen y que nunca se ha de desvelar.
Gracias a ese toque, se consigue un sabor único. Aunque ese toque secreto no se conozca se saben al menos los ingredientes básicos con los que se elabora un gran perol: Carne magra de cerdo, pimiento, tomate, cebolla y ajo. Como ha ocurrido en las últimas ediciones, las degustaciones de este suculento plato ardaleño tienen lugar en torno a las dos de la tarde.
Pero además, los visitantes pueden ver y adquirir numerosos productos típicos del pueblo y de la comarca, gracias a la muestra artesanal y gastronómica que se monta en la propia plaza de la villa. En una veintena de puestos, se pueden ver la gran diversidad de embutidos que salen del cerdo, como el morcón, el lomo o el famoso salchichón blanco de Ardales. También están otros famosos productos del pueblo como sus dulces. La repostería de este municipio es conocida por su calidad y por su variedad, aunque destaca muy especialmente la galleta de almendra, un producto que todavía hoy se realiza de una forma tradicional en establecimientos del municipio.