La Diputación de Málaga ha puesto en marcha un proyecto piloto para personas que sufren trastornos neurocognitivos, como Alzheimer y demencias similares con el uso de un reloj inteligente para monitorizar a quienes sufren estas patologías.
Se trata de una iniciativa que permitirá reducir riesgos y mejorar la sensación de seguridad de quienes padecen estas enfermedades y que, a la vez, permitirá disminuir el nivel de preocupación de sus familiares.
El presidente de la institución provincial, Francisco Salado, ha presentado este proyecto, que se prolongará hasta noviembre y en el que participan 15 personas del Centro de Día de Pizarra, que gestiona la Asociación de Enfermos Familiares de Alzhéimer y Similares de Pizarra (AEFAS). Algunos de los usuarios que ya llevan el reloj inteligente han acudido al acto.
Salado ha explicado que la Diputación de Málaga dedica este año casi 68 millones de euros a políticas sociales, que incluyen tanto la ayuda a domicilio de personas dependientes, las prestaciones de los Servicios Sociales Comunitarios y las ayudas directas a familias y a asociaciones y entidades sociales que trabajan en proyectos de atención a la ciudadanía.
«Y, por supuesto, –ha añadido– también ponemos en marcha iniciativas como las que hoy presentamos, que contribuyen a mejorar la calidad de vida de las personas mayores y las más vulnerables de la provincia, en este caso de quienes padecen algún tipo de trastorno neurocognitivo».
Una de cada ocho personas mayores de 65 años y una de cada dos personas mayores de 85 años sufren Alzheimer o alguna otra demencia asociada, han indicado desde Diputación.
El presidente de la Diputación ha concretado que se trata de una iniciativa que facilita la localización y el seguimiento de las personas con demencia, «porque en muchas ocasiones sufren episodios de confusión y desorientación, y una actuación rápida, conociendo su ubicación, puede reducir los riesgos de que sufran un accidente o males mayores».
Esta experiencia piloto consiste en el uso de un smartwatch o reloj inteligente, que lleva la persona afectada y que va asociado al teléfono móvil de un familiar. El dispositivo permite, por ejemplo, mediante geolocalización, saber la posición exacta de la persona usuaria; y envía alertas si sale de casa o se aleja de un punto establecido. Igualmente, dispone de un sistema de detección de caídas con aviso a los familiares y advierte sobre la alteración de constantes vitales, como la tensión o la frecuencia cardiaca.
Además, en caso de emergencia, también la persona usuaria puede realizar una llamada a alguno de los números predeterminados que se hayan incluido (de familiares o de un cuidador) pulsando un botón.
«Es, por tanto, una herramienta muy útil para reducir los riesgos y mejorar la sensación de seguridad de la persona enferma. Y, a su vez, eso ayuda disminuir el nivel de preocupación de los familiares», ha puntualizado.
Por otra parte, Salado ha anunciado que la Diputación ha presentado dos proyectos a una convocatoria de la Junta de Andalucía sobre Transformación tecnológica e innovación en el ámbito de los servicios sociales, que suman 754.000 euros.
Por un lado, se ha solicitado una ayuda de 363.000 euros para continuar avanzando en actuaciones e iniciativas que contribuyan a combatir la soledad de las personas mayores o dependientes con el objetivo de que puedan permanecer de manera digna viviendo en sus casas el mayor tiempo posible.
«Nos proponemos contar –ha precisado– con dispositivos como pulseras inteligentes de geolocalización, relojes inteligentes de comunicación y sensores de movimiento que ayuden a que las personas mayores que viven solas estén mejor comunicadas con sus familiares que vivan lejos o con sus cuidadores. Y, a la vez, que haya sistemas de alerta para detectar las incidencias o los problemas que los mayores puedan tener en sus casas».
Y, por otro lado, también se pretende mejorar la atención que presta la Diputación de Málaga a través de los 12 centros de Servicios Sociales Comunitarios con que cuenta en la provincia.
En este sentido, se ha presentado un proyecto, por una cuantía de 291.000 euros, para la dotación de nuevos equipamientos y dispositivos tecnológicos en esos centros cara a agilizar la tramitación de las prestaciones, simplificando los procedimientos y minimizando los desplazamientos, facilitando el uso de herramientas tecnológicas tanto al personal técnico como a las personas usuarias de Servicios Sociales Comunitarios.
Se trata, por ejemplo, de dispositivos portátiles, tabletas, equipamiento para salas de videoconferencias, monitores y cuadernos digitales.
