Viajar a otra ciudad y no caer en la tentación de llevarse un imán, un llavero o una camiseta no es tarea fácil. Las tiendas de souvenirs de Málaga tienen claro que el aumento de turistas en la ciudad ha hecho que también aumenten sus ventas, teniendo en cuenta que en lo que va de año ya son dos millones las pernoctaciones que se han dado en la ciudad, según los datos de la Encuesta de Ocupación Hotelera que mensualmente publica el Instituto Nacional de Estadística.
“Estamos notando que cada vez hay más ventas, aunque el año pasado se notó mucho más porque fue el boom de la recuperación después del covid”, sostiene María Abril Morales, de la tienda Raza Tiendas del Mundo, quien asegura que la temporada alta empieza en Semana Santa y llega hasta mediados de noviembre.
Cada época del año está marcada por incluso diferentes tipos de viajeros. “Tenemos dos tipos de turismo: el turístico que es el barato que viene mucha gente desde mayo hasta finales de agosto y luego en septiembre empieza un turismo más cultural que suele ser menos gente pero que tener un nivel adquisitivo más alto, aunque los días de cruceros son los que más se compra porque son personas que vienen varias horas y aprovechan para comprar mucho y eso nos conviene”, añade.
Además de los días de cruceros y de que ya haya miles de turistas a diario en Málaga, las encargadas de las tiendas de recuerdos de la ciudad tienen claro cuáles son los mejores momentos del día y del año para vender sus souvenirs. Por su parte, Emely Medina, trabajadora de una de las tiendas de souvenirs de calle Císter, tiene claro que el mejor momento es desde las 10:00 de la mañana hasta las 14:00 de la tarde, con el punto fuerte de estar cerca del Museo Picasso. “A las 17:00 horas ya vuelve a venir mucha más gente y se forma la fila fuera”, sostiene.
Tiendas de souvenirs
En cuanto a los clientes, los trabajadores de las tiendas de souvenirs coinciden en que la mayoría de personas que suelen acudir a comprar recuerdos son familias, aunque también hay jóvenes que no se van de Málaga sin su souvenir, coincidiendo en que la época estival es clave para el negocio. “En verano vendemos mucho más, pero siempre vendemos sobre todo camisetas, reposacucharas, tazas, ceniceros…Para el turista es muy importante el recuerdo”, añade Medina.
Sin embargo, ya no todo el mundo se decanta por un imán a primera vista, el propio interés de los turistas ha cambiado a la hora de elegir un recuerdo para llevarse a casa. “El souvenir ha cambiado muchísimo, ahora la gente quiere comprar cosas típicas y útiles como un bolso, un paño de cocina…”, comenta Morales, a lo que Daniela Verónica, de la tienda ‘From Málaga with love’ en calle Nueva, afirma que los días de cruceros son los más rentables, con lo que llega un público muy variado, pero coinciden en que “todos se llevan un recuerdo siempre”.