El centro de recepción de visitantes del Caminito del Rey, que ha sido erigido en el término municipal de Ardales (Málaga), ha sido inaugurado este jueves en un acto al que ha acudido el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, que ha estado acompañado por el presidente de la Diputación de Málaga, Francisco Salado, y los alcaldes de Ardales, Juan Alberto Naranjo; de Álora; José Sánchez; de Antequera, Manuel Barón; y de otras localidades como Campillos, Gaucín, Pizarra, Carratraca, Casarabonela, Almogía y Teba, entre otros representantes institucionales.
Ubicada en la carretera MA-5403 (Ardales-El Chorro), a la altura del punto kilométrico 5,500, esta nueva infraestructura demuestra, en palabras de Moreno, cómo «en cerca de ocho años el Caminito del Rey en Málaga se ha consolidado como una importante marca del turismo de interior de la provincia y un poderoso referente dinamizador de la economía de toda la comarca», al mismo tiempo que ha afirmado que «es un ejemplo de cómo poner en valor un recurso turístico de primer orden, preservando los valores naturales y patrimoniales que lo hacen único».
El presidente del Gobierno andaluz ha remarcado que este nuevo centro «demuestra que el desarrollo económico y la sostenibilidad, que no son incompatibles, son factores que pueden abrir la puerta a muchas oportunidades de crecimiento, empleo y bienestar».
Uno de los conceptos en que Moreno más hincapié ha hecho a lo largo de su discurso es «la importancia de la colaboración entre las distintas administraciones» porque de ello «salen mejoras importantes que redundan en beneficio de los ciudadanos» y se ha referido a la Diputación de Málaga y a «su enorme labor para que el Caminito del Rey y su entorno gocen de la mayor protección posible».
De hecho, ha recordado que el ente supramunicipal ya lleva tiempo trabajando en armar una «candidatura potente» que elevarla ante la Unesco con la esperanza de que el conjunto de valores paisajísticos, patrimoniales e industriales del entorno puedan ser declarados Patrimonio de la Humanidad.
En este sentido, ha manifestado que, si este entorno tiene desde 1989 la condición de Espacio Protegido, «también merece ser declarado Bien de Interés Cultural».
Una vez más, Moreno ha incidido en que la colaboración entre administraciones demostrada en la historia de éxito del Caminito del Rey «debe repetirse en toda Andalucía» porque «lo que aquí se ha hecho es fundamental para el progreso y el bienestar de la Andalucía del interior que, a veces, necesita de la acción compartida y de la cooperación entre los distintos municipios y administraciones para poner en el escaparate nacional todo lo bueno que tiene esta comunidad autónoma».
En este sentido, ha aseverado que el Gobierno andaluz está «poniendo todo lo que está en su mano para generar prosperidad en la comarca, dotándola de mejores servicios para todos los vecinos, fomentando el emprendimiento, la cohesión territorial y apoyando a los sectores productivos locales».
Y, en este aspecto, Moreno ha hecho referencia a que Ardales, el pasado mes de mayo, fue declarado Municipio Turístico, convirtiéndose en el décimo con esta distinción en la provincia. «Dado que se trata de una localidad de menos de cien mil habitantes puede acceder a subvenciones especiales para mejorar la calidad de su oferta», ha agregado.
SALADO: EL ESPACIO «VA A DAR UN PASO DE CALIDAD A LA MARCA»
Por su parte, el presidente de la Diputación malagueña, Francisco Salado, tras agradecer la presencia de Moreno y el resto de representantes institucionales, ha asegurado que este nuevo espacio de recepción de visitantes «va a dar un paso de calidad a la marca de excelencia que supone la visita del Caminito del Rey, un entorno privilegiado» y que, gracias al cual, «va a tener una mayor sostenibilidad».
Así, ha asegurado Salado, «se va a acabar con esas colas de vehículos que aparcaban por la carretera del entorno, de manera algo desordenada» y «va a dar no sólo seguridad, con sus 240 plazas de aparcamiento, sino también una bienvenida acorde al visitante para que pueda aprender sobre el pasado y el presente de este enclave, desde todos los ámbitos».
Salado ha remarcado la importancia de los cerca de ocho años de vida del Caminito del Rey «empezando por la implicación del anterior presidente de la Diputación, Elias Bendodo, sin el cual no existiría, y su búsqueda del consenso entre distintas administraciones para que saliera adelante este proyecto que llevaba décadas en la agenda de la Diputación».
Un atractivo «que es uno de los pilares que tenemos para potenciar el turismo interior, que es una de las estrategias que tiene la Diputación, la dinamización de los pueblos del interior para luchar contra la despoblación que es uno de los retos que tenemos» y «la forma de hacerlo es generar riqueza y empleo».
Una obra de rehabilitación la del Caminito del Rey que supuso «2,2 millones de euros y que ha tenido una rentabilidad social y económica sin comparación en la provincia de Málaga», ha afirmado Salado. Y todo esto, «con el mayor respecto medioambiental, porque queremos ser parte de la revolución verde que está llevando a cabo la Junta de Andalucía, limitando las visitas diarias, al tiempo que acogiendo en todos estos años a dos millones de visitantes, lo que ha generado más de 170 millones de euros de impacto directo en la zona».
Salado ha finalizado haciendo hincapié en la necesidad de impulsar el «Corredor Verde del Guadalhorce, que es el parque fluvial que queremos diseñar más grande de Europa, con senderos, pasarelas, carriles bici, parques… un recorrido de 54 kilómetros entre los parajes naturales de la desembocadura del Guadalhorce en la capital y el Desfiladero de los Gaitanes y que va a dinamizar toda la provincia de Málaga» con 78 actuaciones ya diseñadas por 156 millones de euros.
«Y para eso hay que exigir que vengan fondos europeos a esta inversión medioambiental y entre todos se produzca esa recuperación para los que nosotros ya hemos dado los primeros pasos como la construcción del puente de Álora y poniendo 10 millones de euros sobre la mesa», ha finalizado Salado.