La Junta de Personal del Hospital Clínico Universitario Virgen de la Victoria de Málaga, conformada por los sindicatos CCOO, CSIF, FTPS(SAE-FATE), SATSE, SMA y UGT, en representación de todos sus trabajadores y trabajadoras, advierte de la «escasez» de recursos humanos para afrontar la sexta ola de la COVID-19.
Así, en un comunicado, trasladan el «malestar y la preocupación» de la plantilla del Hospital Virgen de la Victoria «por no poder desempeñar su trabajo con las mínimas garantías exigidas y no poder mantener la seguridad clínica y cuidados del paciente, además de su bienestar durante la estancia hospitalaria». «Afrontamos la sexta ola de la pandemia sin personal suficiente», sostienen.
En este sentido, precisan que llevan meses advirtiendo a las direcciones del centro hospitalario de esa falta de personal «tan importante» que tienen «diariamente» y que hasta ahora se había «encubierto con la contratación que se había hecho para tratar la COVID».
Al respecto, fuentes de la dirección del centro sanitario han informado a Europa Press que el hospital mantiene «toda la actividad» y evalúa «en cada momento la situación asistencial para dar la respuesta necesaria». «Las contrataciones se harán en función de las necesidades de cada momento», han sostenido.
La Junta de Personal denuncia en su comunicado que las plantillas del hospital «están obsoletas y no acordes a las cargas de trabajo», lamentando que un hecho «que agrava aún más esta situación es que sólo se contrata un porcentaje mínimo de bajas y reducciones de jornadas por guarda legal, dejando más de 300 puestos sin cubrir».
Además, añaden, el resto de contratos que se realizan se usan para cubrir servicios, entre los que han citado «la ampliación de la UCI, o la apertura de diferentes consultas, quirófanos y una planta de hospitalización en el Hospital Valle del Guadalhorce que no llevan plantillas asignadas por el SAS de ninguna categoría y quedando todo ello al descubierto por la disminución de contratación efectuada desde el pasado 1 de noviembre».
Esta situación, sostienen en el comunicado suscrito por todos los representantes sindicales, ha supuesto «que se denieguen permisos y días libres a los trabajadores de este centro generando un gran malestar y una sobrecarga física y mental, ya que se han aumentado las cargas de trabajo y, por tanto, disminuyendo la calidad asistencial, debido a la merma del número de trabajadores».
CONTRATACIONES «PRECARIAS E INSUFICIENTES»
Para la Junta de Personal resulta «inaceptable que las autoridades sanitarias lleven semanas sin dar ninguna explicación coherente a estos hechos y más en plena sexta ola de la pandemia, con contrataciones precarias e insuficientes».
Actualmente, sostienen, «no tenemos enfermeras y médicos para contratar, ya que hay una cantidad importante que han emigrado a otras comunidades donde se les ha ofrecido mejores contratos, o en el caso de otras categorías que han visto muy disminuido el número de contrataciones, y ha supuesto un aumento en el trabajo diario del hospital y en las listas de espera para citas en consultas, pruebas complementarias y quirófanos».
La Junta de Personal no comprende cómo «no existe dinero para contratar personal para mantener una óptima calidad asistencial, y el hospital invierte 35.000 euros en la contratación de personal externo durante 20 días para solicitar el certificado Covid a los usuarios que acceden al centro hospitalario, cuando con esa suma de dinero se podría haber contratado personal SAS de diferentes categorías».
También denuncian la apertura de nuevos servicios «anunciados a bombo y platillo sin la dotación del personal necesario para su correcto funcionamiento, y usando profesionales de otros servicios, con lo que no se cumplen los estándares de calidad, perdiéndose eficacia a la hora de tratar a los pacientes durante su estancia en el centro». «Es lo que comúnmente se llama vestir un santo para desvestir otro», afirman.
Por todo ello, los representantes de la Junta de Personal denuncian públicamente la gestión por parte de las diferentes direcciones «de sus respectivas plantillas, y no evitar hechos reiterados como que haya profesionales que no sepan su planilla mensual con el tiempo debido para poder organizarse con sus familias o que una semana antes de las Navidades no sepan ni servicio asignado ni turno».
Al respecto, recuerdan que, según la Ley 7/2007, de 12 de abril, del Estatuto Básico del Empleado Público, «se nos debe proporcionar en tiempo y forma toda la información sobre cuestiones que afecten a los trabajadores y de los cambios organizativos, hechos que no siempre ocurre y se nos ignora».
Así, la Junta de Personal insta a la Dirección Gerencia del Hospital, a la Dirección Gerencia del SAS, al delegado territorial de Salud y Familias de Málaga, Carlos Bautista; y al consejero de Salud y Familias, Jesús Aguirre, «que consideren la situación, y se invierta económicamente en este hospital en recursos humanos de todas las categorías, además de en infraestructura y en nuevos servicios (lo cual vemos oportuno)». Todo ello, zanjan, para «poder conseguir mantener unos niveles de atención sanitaria de calidad, acordes a las necesidades que la población malagueña se merece».
RESPUESTA DEL CENTRO SANITARIO
Desde el centro sanitario lanzan un «mensaje de tranquilidad» a la población ante un comunicado que «genera alarma social», incidiendo en que «la asistencia COVID y No COVID está garantizada» en el Hospital Clínico Virgen de la Victoria.
Además, añaden que el hospital mantiene «todas las cirugías programadas, urgentes y no demorables», subrayando que la dirección del centro sanitario «evalúa la situación asistencial de cada momento para dar la respuesta necesaria».
Actualmente está abierto el circuito COVID en las tres áreas fundamentales: Urgencias, Hospitalización y Cuidados Críticos. «Están activos y operativos desde que se inició la pandemia dando respuesta a las necesidades del momento».
Sobre esa falta de personal, insisten en que «se dará respuesta según las necesidades del momento, mantenemos la atención en todas las áreas».