La Comisión contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte ha propuesto una sanción de 30.000 euros a la Federación Vasca de Fútbol por permitir el acceso de bengalas y petardos de gran potencia en el amistoso Euskadi y Uruguay (1-1). Antiviolencia multa con 30.000 euros a la Federación Vasca de Fútbol por la bengalas en el Euskadi-Uruguay. El partido se disputó el pasado 23 de marzo en San Mamés.
Antiviolencia multa con 30.000 euros a la Federación Vasca de Fútbol por la bengalas en el Euskadi-Uruguay
Además, en este encuentro se desplegó una pancarta de grandes dimensiones que no había sido comunicada previamente al coordinador de seguridad y de la que no se había presentado certificado ignífugo, y porque numerosos aficionados ocuparon las vías de evacuación del estadio sin que el personal de seguridad tomara las medidas necesarias para evitarlo.
Igualmente, Antiviolencia ha propuesto otra sanción de 30.000 euros al Athletic Club al permitir que se introdujeran varios petardos de gran potencia escondidos en una pancarta de grandes dimensiones -solicitada y preparada por el Athletic Club de Bilbao- y un paquete con varios artefactos pirotécnicos en la Final de la Copa Athletic Club-Mallorca en La Cartuja de Sevilla.
Dicha comisión informó de que el Athletic Club solicitó y preparó el tifo señalado, eligiendo entre sus aficionados a 30 personas para que pudiesen acceder al recinto de manera previa, sin pasar los controles ordinarios de acceso, a instalar el elemento de animación indicado.
Antiviolencia recordó que la Ley contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte de 2007 sanciona la facilitación de medios materiales, que den soporte a la actuación de personas o grupos que promuevan la violencia, o que inciten, fomenten o ayuden a comportamientos violentos o terroristas.
Igualmente propuso tres propuestas de sanción de 3.001, 4.000 y 60.001 euros y prohibición de acceso a los recintos deportivos por un período de dos años a un aficionado de un grupo radical y violento del equipo local que en el amistoso Euskadi-Uruguay golpeó violentamente a un vigilante de seguridad, introdujo en el estadio varios petardos de gran potencia que llevaba consigo escondidos y además quebrantó una prohibición de acceso a los recintos deportivos que tenía en vigor por otra sanción anterior.