Punto y final a la mala racha en Liga del Dólmenes Antequera. Le ha costado un total de cinco partidos para derribar la barrera y celebrar la primera victoria del campeonato. Un empate y cuatro derrotas seguidas se habían convertido en una pesada losa de la que, por fin, se pudieron liberar jugadores y cuerpo técnico con un gran encuentro en el Pabellón Fernando Argüelles frente al Barça Atlètic (30-27).
El triunfo se sustentó en la intensidad defensiva y en el acierto de Pepe Marín en portería. Un choque en el que quedó patente la importancia de la aportación, en general, del grupo. Si hay algo importante en la escuadra verde, es que todos tienen un papel importante a la hora de luchar por los puntos. En esta cita, en el aspecto goleador, brilló tanto Jota Abad como Jacob Díaz con cinco goles cada uno.
La formación antequerana, desde el principio, marcó un ritmo alto y se mostró dominadora en fase defensiva y ofensiva, aunque el filial azulgrana no le perdió nunca la cara al envite. De un 6-2 se pasó a un 7-6 y, al descanso, el resultado quedó bastante apretado (13-12). Ya en la segunda mitad, los chicos de Lorenzo Ruiz supieron jugar con esa presión de verse en un encuentro disputado y con el riesgo de volver a ceder puntos. Aguantaron el empuje de su rival y, en los instantes finales, recibieron ese aliento extra del público para aguantar arriba y celebrar los dos puntos (30-27).