El jugador de baloncesto rinconero Mario Saint Supery sumó una nueva intensa experiencia con el primer equipo del Unicaja, donde ya está instalado a las órdenes del técnico Ibon Navarro, que está gestionando con mimo el aterrizaje del joven de tan sólo 16 años. Han odído bien, 16 años. Pues la edad no se notó apenas sobre el parqué de Murcia, donde el Unicaja logró la clasificación a la Final Four de la Champions ganando por un contundente 74-96.
Mario Saint Supery salió a la pista en la recta final del encuentro, cuando estaba más o menos encarrilado, y no le pesó la alta tensión que se vivió en el partido. Hasta recibió un manotazo de un rival que recibió con deportividad. En el minuto y 49 segundos que estuvo en partido anotó 4 puntos y dio una asistencia. El rinconero sigue cogiendo minutos en la élite y respondiendo. Está en situación de tener más protagonismo próximamente debido a las lesiones que tiene el equipo. Así que se avecina un ilusionante final de temporada para el joven talento rinconero, una de las grandes promesas del baloncesto español.