El Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 2 de Málaga ha ratificado el ingreso en prisión provisional decretado para el hombre detenido por supuestamente estrangular a su esposa, desaparecida hace seis meses, y enterrarla bajo hormigón en una nave de un polígono de la capital malagueña, han informado fuentes judiciales.
Las fuentes han indicado a Europa Press que el investigado fue trasladado este pasado miércoles para comparecer ante dicho juzgado, donde volvió a reconocer los hechos, como ya hiciera ante el juzgado de guardia y ante la Policía Nacional. Además, la jueza ha acordado que se lleve a cabo otra inspección ocular del lugar.
El hombre fue citado el pasado viernes en la Comisaría Provincial por el Grupo de Homicidios y en el interrogatorio, de más de cinco horas, cayó en algunas contradicciones que pusieron en entredicho su coartada, de forma que terminó reconociendo los hechos y llevó a los agentes hasta donde estaba el cuerpo enterrado.
Así, fue puesto a disposición judicial el lunes, investigado por un delito de homicidio, y el Juzgado de Instrucción número 13, en funciones de guardia, decretó su ingreso en prisión, así como la inhibición en favor del Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 2, que se encarga ya de la instrucción de la causa.
La víctima fue vista por última vez el 28 de marzo y el ahora investigado hizo creer a los familiares y amigos que se había marchado voluntariamente. La investigación policial se inició el pasado día 15 de abril cuando un amigo de la fallecida denunció en Palma de Mallorca su desaparición.
A partir de ese momento, el grupo de Homicidios de la Comisaría Provincial de Málaga se hizo cargo de las pesquisas al residir la desaparecida en la capital malagueña. Así, los investigadores comenzaron a indagar sobre la vida y el entorno social de la mujer, de origen brasileño.
Tras las primeras averiguaciones, la Policía descubrió que la mujer residía en Málaga junto a su marido y dos hijas en común. La pareja, aunque aún convivía bajo el mismo techo, se hallaba en trámites de separación.
Según consta en las bases de datos policiales, la desaparecida denunció por malos tratos a su marido en 2012 –no ratificando luego la misma en sede judicial–. Más recientemente, en 2021, la mujer fue asistida en el hospital con lesiones compatibles con otra agresión, abriendo el centro médico el protocolo por supuesto episodio de violencia de género, hechos que fueron puestos en conocimiento de la autoridad judicial –aunque no hubo colaboración tampoco de la víctima–.
