El Campeonato del Mundo Universitario de Balonmano ya tiene definidas las semifinales masculinas y femeninas que se jugarán el viernes 28 de junio en el Pabellón Fernando Argüelles justo después de la jornada de descanso estipulada en el calendario. En la parte de los chicos, República Checa se enfrentará, a las 13:45 horas, a Polonia, mientras que España lo hará con Francia a partir de las 16:00 horas. Y en la parte del cuadro de las chicas, Polonia frente a Francia a las 18:15 horas y España contra República Checa a las 20:00 horas.
España y República Checa acaban la fase de grupos, en el lado masculino, como las dos mejores selecciones
Los Guerreros Universitarios han establecido un ritmo ganador que no quieren perder en lo que resta de campeonato. Tres encuentros y tres victorias con marcadores bastantes solventes y, lo más importante, un juego convincente. Seguros atrás para aguantar el empuje de sus rivales y, con balón, han demostrado una toma de decisiones excelente a la hora de bajar o subir las revoluciones en cada una de las ofensivas. En su envite con Brasil, el último del Grupo A, volvió a rendir al nivel que se les presupone a los grandes jugadores que entrena Diego Dorado. Resultado final de 33 a 17.
Sin nada en juego a nivel clasificatorio, con Polonia en segunda plaza e India en cuarta, los dos equipos saltaron a la pista a competir y disfrutar y eso se notó, especialmente, en los jugadores del sur de Asia estuvieron más sueltos que en anteriores días y pudieron ofrecer mejores prestaciones para alcanzar su cifra más alta de goles en un choque: 20. Los polacos, por su parte, no se desgastaron en exceso y se adjudicaron la victoria con la contundencia que le ofrece su potencial físico tanto en ataque como en defensa (20-44).
La jornada, en el cuadro masculino, finalizó con un auténtico partidazo. Francia y República Checa se lo dejaron todo en la pista. Ninguna de estas dos selecciones tenía definido su puesto, por lo que dependían de lo que reflejara el electrónico al término de los 60 minutos. Por las características de unos y otros, iban a producirse constantes pugnas por perforar la red de las porterías. Las defensas brillaron más que los ataques porque el tanteo fue bajo. Pocos tantos y un desenlace apasionante en el que los checos salieron vencedores y se quedaron con la primera posición y dejaron la segunda para los franceses (20-22).
La primera ronda femenina finaliza con España al frente del Gr. A y Polonia del Gr. B
Sin calificativos para definir lo ocurrido en uno de los tres duelos vespertinos en el lado femenino de la competición. España y Francia se retaron por el primer peldaño del Grupo B. Hubo de todo. Igualdad, emoción, intensidad, nervios, incertidumbre y, lo más esencial, un balonmano de alto nivel. El combinado nacional arrancó de forma excepcional, pero su oponente replicó y se colocó cuatro dianas por delante al descanso (13-9). Las chicas de Ismael Martínez, a la vuelta de los vestuarios, volvieron a ser dominadoras del choque y tomaron las riendas del electrónico hasta encarar el tramo final con una renta positiva de tres-cuatro tantos. Francia volvió a emerger en la pista y ajustó el resultado hasta igualarlo (27-27). No se rompió el equilibro de fuerzas y, una vez sonó el pitido de las dos colegiadas, hubo que esperar a comprobar el ‘goal avergage’ y determinar que España iba a ser primera y Francia segunda.
Había muchas miradas puestas en otra batalla con un preciado botín para la formación capaz de salir ganadora una vez finalizado el tiempo reglamentario. Polonia arrancó mejor que Países Bajos que, con pérdidas y lanzamientos fallados, vio cómo se quedó atrás y acumuló una desventaja de seis goles al descanso (19-13). Los partidos pueden cambiar de rumbo, aunque parezcan decididos, y así ocurrió. Las jugadoras holandesas se repusieron a cuatro minutos seguidos de inferioridad numérica y recobraron sensaciones competitivas para apretar el luminoso. Polonia resistió y empató 31-31 y conservó el liderato del Grupo B por delante de República Checa.
Concluyendo el repaso al calendario del miércoles 26 de junio, en el Gr. B, Chile se midió con la República Checa sabiendo que, al no contar con puntos, tampoco iba a luchar por estar en la pelea por las medallas. El caso del conjunto europeo era totalmente distinto. Con un triunfo y una derrota sí necesitaba ganar y esperar al final de la cita entre Países Bajos y Polonia para saber si contaba con un hueco en semifinales o no. La diferencia entre chilenas y checas no se notó hasta cerca del final de la primera parte y creció, poco a poco, hasta ser holgada a la conclusión de la contienda (21-36).
