El alcalde de Antequera, Manolo Barón, el teniente de alcalde delegado de Contratación, Juan Rosas, y la teniente de alcalde de Patrimonio Histórico, Ana Cebrián, han comparecido este martes en rueda de prensa para anunciar la inminente continuación de las obras de recuperación y rehabilitación de la Villa Romana de la Estación, considerada uno de los principales vestigios arqueológicos de época romana en Andalucía.
Esta confirmación, han indicado, se produce una vez se ha logrado solventar la problemática surgida a raíz de la renuncia de la empresa que inicialmente fue adjudicataria del proyecto en el año 2019, Díaz Cubero, motivada y justificada en base a que no podían seguir haciendo frente a la misma por el encarecimiento y subida generalizada de precios de los materiales y materias primas necesarias, cuyos precios en apenas unos meses no se ajustaban a las cantidades presupuestadas inicialmente.
Ante esta situación, el Ayuntamiento decide volver a sacar a concurso el proyecto resultando adjudicataria del mismo la UTE formada por dos empresas constructoras: Actúa Infraestructuras y Grupo Fersón. Mauricio Delgado y Juan Alberto Domínguez, responsables de dichas empresas también presentes hoy en la rueda de prensa, han confirmado que el reinicio efectivo de la actividad en torno a este proyecto tendrá lugar en unos 15 días, por lo que se estima que a mediados de septiembre pueda ser una realidad.
Teniendo en cuenta que el importe por el que se adjudicó el proyecto en el año 2019 fue de 779.503,56 euros, que de ellos ya se certificaron 355.692,71 euros y que el nuevo importe de adjudicación asciende a 852.011,09 euros, se desprende que el Ayuntamiento de Antequera ha tenido que aportar ahora 498.483,71 euros de forma extraordinaria para poder acabar este proyecto, incluido a su vez en los fondos del 1,5 por ciento cultural por las obras del AVE. Este aumento se justifica en base al aumento generalizado de los precios tanto de los materiales, infraestructuras y materias primas dispuestas en el proyecto y necesarias para su desarrollo; también se tienen en cuenta los nuevos descubrimientos que se han venido sucediendo conforme se ha iniciado la obra, lo que ha obligado a redefinir o ampliar en algunos casos diversos aspectos del proyecto.
«El contrato ya está por fin firmado», ha señalado el Alcalde, quien ha agradecido a su vez a las empresas Actúa Infrestructuras y Grupo Fersón que hayan accedido para continuar con el desarrollo de un proyecto que se quedó parado. También ha informado que el plazo estimado de ejecución de la obra restante es de 5 meses, confirmando que ha costado «muchísimo trabajo» poder darle continuidad a este proyecto por numerosas circunstancias que se han dado en torno a él.
El proyecto de consolidación y puesta en valor de la Villa Romana de la Estación de Antequera contempla, según indican desde el Consistorio, la total definición de las obras de puesta en valor, los trabajos arqueológicos de tratamiento, la construcción de todos aquellos elementos necesarios para la conservación de la villa romana y plataformas para hacer un recorrido visitable, completado con los senderos y acondicionamiento que el terreno precise, el vallado perimetral de la zona, la red de drenajes y recogidas, la instalación eléctrica e iluminación, así como la señalética y parte de la adecuación de exteriores para permitir su acceso desde la zona de aparcamientos de la actual estación de ferrocarril.
Sobre la Villa Romana de la Estación
La Villa Romana de la Estación posee una serie de valores fundamentalmente de carácter histórico, arqueológico y artístico, que justifican plenamente su importancia y relevancia, destacando el buen grado de conservación de sus estructuras, así como la singularidad de los hallazgos materiales, que han permitido la interpretación integral de la villa y la reconstrucción de este ambiente arqueológico, ya que la mayoría de las piezas documentadas aparecen contextualizadas en su marco espacial y arquitectónico.
Esta villa se adscribe a la tipología denominada “de peristilo” y en concreto su origen se remonta a la segunda mitad del siglo I d. C., detectándose su abandono a finales del siglo IV o principios del V. Se caracteriza en esencia por un suntuoso matiz residencial, reflejo de la ideología y capacidad adquisitiva de sus dueños, destacando la calidad de la estatuaria aparecida, principalmente, en el ámbito del peristilo y directamente relacionada con la decoración de fuentes y estanques, siendo especialmente relevantes también los mosaicos hallados y salvaguardados.