La Asociación para el Desarrollo y Defensa del Mundo Rural (Alma Rural) celebrará la «gran manifestación del mundo rural» el próximo domingo, 23 de enero, en Madrid, para denunciar la situación que sufren todos los colectivos rurales cuyas actividades, consideran que son «continuamente amenazadas por normativas incoherentes, así como actuaciones que se ven claramente orientadas a acabar con su actividad».
«No lo vamos a permitir», aseguran los colectivos de Alma que el domingo por la mañana, a partir de las 11.00 horas se manifestarán desde la Plaza de San Juan de la Cruz, donde se ubica el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, hasta la plaza de Carlos V, en Atocha, donde se sitúa el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
«A partir de ahora el mundo rural unido se defiende de estos ataques», garantiza en un manifiesto que será leído también el domingo en el que se espera la asistencia de un millón de personas para reivindicar la labor que realiza el sector primario y que vive actualmente «una situación límite».
El segundo de los objetivos de los convocantes es lograr interferir en las leyes, normativas y políticas agrarias, ganaderas, medioambientales o sociales que son «desacertadas» para exigir que se adapten a «la realidad del campo» y a su vida cotidiana. «Exigimos que se nos tenga en cuenta a la hora de legislar», insiste Alma que ha invitado a «todos los grupos políticos, sin distinción», para que sean testigos de su situación y reivindicaciones, así como de su «malestar general».
Por otro lado, quieren dar a conocer a la sociedad que el campo «nunca falla» y recuerda que, ni cuando se vivió ‘Filomena’, ni durante la pandemia, faltaron los alimentos en los supermercados «gracias al esfuerzo y sacrificio del sector primario y del mundo rural». En ese sentido, defiende también su esfuerzo de control de enfermedades como la tuberculosis que existe en los animales silvestres para que no llegue a la ciudad.
Por eso, necesitan que los consumidores y la sociedad en general les «apoye y proteja» para que puedan seguir desarrollando sus trabajos y actividades y, en ese sentido, instan también a los medios de comunicación a colaborar en la difusión de «lo que de verdad ocurre en el campo, lo que sufre el mundo rural, para llevar una sola voz clara a la sociedad».
Vaticinan que sin sector primario ni mundo rural, España dejaría de ser lo que es en la actualidad.
Abrirán la marcha 40 tractores, 50 caballos, 15 carros tirados por bueyes, perros de trabajo y mascotas y aves de cetrería. Han confirmado su asistencia más de 300 asociaciones y colectivos de todos los sectores implicados y políticos de grupos con representación parlamentaria.
Durante la misma, el sector de los animales de compañía expresará también su rechazado al borrador de la ley de protección y derechos de los animales porque considera que ha sido confeccionado «sin el conocimiento ni la más mínima participación de los sectores profesionales».
La Asociación Nacional del Sector del Animal de Compañía, que representa a las tiendas de animales, defiende que en España el comercio especializado está en manos de pequeñas empresas familiares distribuidas por toda España que son conocedores y respetuosos con el mundo animal.
«Por cultura, por principios, por ética, por conocimientos y porque es nuestro modo de vida lo que más nos importa es el bienestar animal», asegura la entidad que reclama la retirada del anteproyecto de ley porque la norma supondría «un paso atrás» en el bienestar, pérdida de puestos de trabajo y fomento del mercado negro.