La ciudad de Marbella dará el próximo lunes, 26 de septiembre, los primeros pasos para la tramitación de su Plan General de Ordenación Municipal (PGOM) conforme a los criterios de la nueva Ley de Impulso a la Sostenibilidad del Territorio en Andalucía (Lista).
Así, el lunes se llevará a Pleno Extraordinario el documento previo y, tras ese paso, se solicitarán los informes sectoriales estatales de Carreteras, Costas, Ferrocarriles y el relativo a la Calidad del Aire que son necesarios para su aprobación inicial, prevista para principios de 2023.
La alcaldesa del municipio, Ángeles Muñoz, ha indicado que Marbella se convierte así «en la primera localidad de la comunidad autónoma» en adaptar a la nueva ley Lista su PGOM, donde se apostará además por un modelo basado en la sostenibilidad ambiental, económica y social «que garantice la calidad de vida favoreciendo la ciudad de los 15 minutos o de proximidad».
La regidora, que ha estado acompañada por la concejala del ramo, María Francisca Caracuel, ha recordado que «la normativa vigente diferencia dos planes, el PGOM, al que le corresponde la ordenación general de todo el término municipal, y el Plan de Ordenación Urbana (POU), que detalla la del suelo urbano».
Muñoz ha señalado que «es un documento más ágil y flexible que otorga una mayor competencia municipal y que reduce considerablemente los plazos, porque anula la aprobación provisional, solo contempla la inicial y, tras un periodo de exposición pública, la definitiva, por lo que prevemos dar luz verde a ambos planes a principios del próximo año y que todo el proceso, que se llevará a cabo en paralelo, finalice en 2024».
Al respecto, ha explicado que «la Lista limita la clasificación del suelo a dos clases, urbano y rústico, y desaparece el urbanizable, reduciendo mucho la especulación», y ha especificado que «el urbano es el que tiene dos tercios de su superficie edificadas, cuenta con acceso rodado y servicios, y el resto es rústico, con distintas categorías, pero con voluntad de que la mayoría se desarrolle con la máxima celeridad a través de una tramitación clara y expresa y con un criterio de oportunidad para el Ayuntamiento que, esencialmente, es que esté enclavado en la malla urbana, ofreciendo una mayor garantía de sostenibilidad y abaratando su coste».
La regidora ha puesto el acento en que las zonas definidas como urbanas aumentan en más de un 25% con el nuevo plan, pasando de menos de 40 millones de metros cuadrados a más de 52 millones, mientras que el rústico alcanza los 65 millones. Asimismo, ha resaltado que «Marbella es una ciudad que triplica la ratio de cinco metros cuadrados de zona verde por habitante que marca la ley, con un total de 16 metros cuadrados, y también cuenta con cinco metros cuadrados de equipamientos por habitante» y ha destacado que «el modelo de ciudad que define el nuevo plan profundiza estos aspectos y refuerza la sostenibilidad a todos los niveles».
Respecto al modelo de proximidad, ha sostenido que «hay que implementar correctores para evitar que los residentes de urbanizaciones que se encuentran aisladas tengan que desplazarse para tener los servicios cerca» y ha afirmado que «se apuesta por fomentar las actuaciones en los núcleos existentes y favorecer la compacidad urbana».
Muñoz ha expresado su satisfacción «porque el gran esfuerzo que se ha realizado, con una interlocución constante con la Junta de Andalucía y con los grupos de la oposición, va a permitir sacar adelante un documento que va a sentar las líneas estratégicas del desarrollo urbanístico de nuestra ciudad» y ha adelantado que «a lo largo de todo el proceso, seguiremos manteniendo encuentros con los agentes sociales y los distintos colectivos para garantizar que sea un plan participativo que responda a las necesidades presentes y futuras del municipio»