La presencia de jabalíes en zonas urbanizadas se está convirtiendo en una estampa cada vez más frecuente. Desde el cauce del río Guadalmedina, donde estos animales fueron vistos por última vez a comienzos de semana, hasta la zona Este de la ciudad, pasando por otros puntos de la provincia como Rincón de la Victoria o Mijas. Los acercamientos de estos mamíferos son ya una problemática que ocurre prácticamente a diario, por lo que las instituciones locales quieren poner una pronta solución a través de una serie de medidas.
Rafael Yus, presidente del Gabinete de Estudios de la Naturaleza de la Axarquía (Gena – Ecologistas en Acción), afirma que se trata de un problema que “viene de largo”, ya que los animales “se acercan desde hace tiempo a la ciudad”. Asimismo, Yus advierte de los peligros que pueden ocasionar los jabalíes en la proliferación de accidentes de tráficos, por lo que invita a la ciudadanía a no proporcionarles alimento para evitar que vuelvan a acudir a la zona.
El Ayuntamiento de Málaga ya acordó destinar meses atrás una partida de 15.000 euros para la contratación de una empresa externa que controlase a las poblaciones de jabalíes. Sin embargo, ante la continuidad de los avistamientos de estos mamíferos, desde el Consistorio afirman que se encuentran gestionando un paquete de medidas -pendientes aún de ser aprobadas- de manera conjunta con la Junta de Andalucía, para evitar o disminuir estos episodios.
Entre las opciones que se postulan con mayor fuerza para contrarrestar la presencia de jabalíes en zonas urbanizadas se encuentra la disposición de abrevaderos, ya que la implantación de este tipo de piletas en el campo facilitaría el acceso a agua para estos mamíferos, minimizando así sus acercamientos a la ciudad.
Otras medidas adoptadas
No serían las primeras decisiones que desde las instituciones se toman alrededor de este tema. El verano pasado, sin ir más lejos, la Junta de Andalucía autorizó una serie de medidas excepcionales para el control de la población de jabalíes, entre las que destacaban la aprobación de la caza selectiva de esta especie. En Mijas, por su parte, el ayuntamiento contrató a comienzos de año a una empresa de arqueros con el fin de poner fin al aumento de jabalíes salvajes que, según un informe policial, deambulaban sin control por el municipio.