La piedra angular del nuevo e ilusionante proyecto deportivo del BeSoccer CD UMA Antequera se ha colocado con la renovación de Tete y Crispi en el banquillo. El siguiente paso no podía ser otro que garantizar la continuidad de la sonrisa inagotable del vestuario y del líder dentro y fuera de la pista. Miguel Conde Toscano se ha convertido en uno de los emblemas más valiosos del club y el mejor representante de lo que es identificarse con una filosofía y valores innatos en esta familia deportiva. Se dice pronto, pero ya son 12 temporadas consecutivas defendiendo la elástica verde con profesionalidad y pasión. Hay que reforzar las redes del Argüelles, ya que el capitán está preparado para perforarlas en el próximo campeonato de Liga en 2ª División.
Miguel Conde es un líder dentro y fuera de la pista que, durante muchos años, ha rendido a un gran nivel sobre el 40×20 y ha aportado tanto en ataque como en defensa. En la competición liguera, finalizada hace varias semanas, participó en 27 jornadas y marcó 8 dianas. “Soy todavía joven. En el fútbol sala, un jugador de 30 años, tiene cuerda para rato. Me veo con mucha fuerza y ánimos a pesar de haber tropezado este año. Hay ganas de levantar el vuelo y regresar al lugar donde, deportivamente, debemos estar que es la Primera División. Preparado para afrontar una nueva temporada en el BeSoccer CD UMA Antequera”, destaca el ala natural de Cuevas del Becerro (Málaga).
En la Ciudad de Los Dólmenes se viene disfrutando de un fútbol sala de muchísimo nivel y el capitán del equipo deja claro que la intención es colocar, de nuevo, el Argüelles en la ruta de destino de los mejores equipos de la geografía nacional. “El objetivo está claro. Es subir a Primera. Vamos a intentar hacerlo lo mejor posible, durante toda la temporada, para poder ahorrarnos el trámite del play-off que es el que más nos cuesta siempre. Lucharemos por el primer puesto, sino lo haremos en la fase de ascenso contra el rival que sea. Estamos convencidos de que vamos a estar entre los cinco primeros para pelear por una plaza en la máxima categoría. La meta no puede ser otra”.
