El técnico malaguista dio la cara tras el fiasco ante el Huesca. Esto fue lo más destacado de su comparecencia:
Análisis del partido: “ Un buen primer tiempo y un segundo tiempo en el que te hacen dos goles pronto. Estoy mal, ¿cómo voy a estar? Éramos optimistas al descanso. Estábamos creciendo en el partido y sales con ilusión al segundo tiempo y encajas pronto. En esta situación afecta”.
¿Su puesto en riesgo?: “Mi situación es de tranquilidad. Sé lo que es esto. Son momentos difíciles, pero desde mi posición voy a transmitir optimismo, trabajo y soluciones. No es un día feliz para mi. Ni para hablar de mi puesto de trabajo. Entiendo a todos, pero no soy quién. Yo sé lo que soy y sé lo que tengo entre manos. Son decisiones que se pueden tomar. No puedo defender esos números. Claro que entiendo a la gente”.
Dolor por la derrota: “No soy malagueño pero trabajo en el Málaga y estoy triste. Los jugadores son los primeros que quieren ganar. Podemos estar más o menos afectados, pero queda darnos cabezazos o entender que estamos en una situación delicada y que tenemos que salir de ella”.
¿Mejoras?: “Ojalá pudiera decir “haciendo esto el domingo que viene vamos a ganar”. No nos queda otra que seguir trabajando. Nadie podrá decir que los primeros 45 minutos no han sido buenos. En una jugada desgraciada se nos viene todo encima. En esta situación todo son desgracias”.
Gritos de los aficionados: “Además se empieza con el “jugadores mercenarios” y a todos nos pueden temblar las piernas. Entiendo a la gente, pero tenemos que solucionar esto”.
Retirada a vestuarios: “Estoy de acuerdo que al final hay que acabar como campeones. Entiendo que el equipo tiene que responder a la afición. Somos conscientes de lo que nos jugamos. Los que tienen contrato, los que no, los cedidos… todos nos jugamos algo. No es problema de actitud”.
Vestuario: “La falta de compromiso, de trabajo… eso ya es de cada uno. Yo sé cómo soy yo. Y que tratamos de entrenar todos los aspectos del juego. Pero quiero que la gente entienda que haces buenos 45 minutos y en uno se va todo a la mierda. En el día a día del campo no tengo ninguna queja. Hay algunos contentos y otros descontentos con sus minutos. Yo te puedo hablar del día a día. Yo cuento lo que me he encontrado en estas ocho, nueve semanas”.
Lucha por la salvación: “Estamos involucrados en el descenso desde hace mucho tiempo. Así es esta liga. Ganas dos, sales. Pierdes dos te vuelves a meter”.