El segundo clasificado de División de Honor Plata y candidato al ascenso, Horneo EÓN Alicante, no es el rival idóneo para que el Balonmano Dólmenes Antequera puede romper con una dinámica muy negativa de resultados. Son tres derrotas consecutivas, la última bastante dolorosa al haber sido ante Lanzarote que lucha por el mismo objetivo de la permanencia, y solo ha podido ganar al Barça Atlètic y empatar con Zarautz. La situación clasificatoria, colista con tres puntos, exige apretar los dientes y darlo todo en la pista en busca de un marcador favorable sea cual sea el oponente que haya enfrente.
Alicante se presenta el sábado 16 de noviembre, a las 18:30 horas, en el Pabellón Fernando Argüelles herido tras perder su última batalla liguera con Trops Málaga (21-22) que le dejó sin liderato que, ahora, ostenta San Pablo Burgos. Fernando Latorre, un técnico muy experimentado tanto en el primer como el segundo escalón competitivo, dirige una plantilla diseñada con jugadores determinante en cada uno de sus puestos que brillan a nivel ofensivo. Este equipo cuenta con una media de casi 33 tantos por encuentro. El reto es de enjundia para un plantel verde que va a necesitar alcanzar la perfección en su juego y apoyarse en su afición.