Los Bancos de Alimentos de Andalucía han reflejado un descenso en cuanto a donaciones durante estos meses de julio y agosto, ya que las recogidas de alimentos se han visto resentidas hasta llegar a reducirse a la mitad a lo largo de este periodo estival.
En declaraciones a Europa Press, el presidente del Banco de Alimentos de Sevilla, Francisco Arteaga, ha reseñado que este descenso en términos de ayudas alimentarias se debe esencialmente a que «en julio y sobre todo, en agosto, no se producen campañas ni movilizaciones específicas y tampoco llegan aportaciones procedentes de los supermercados o cuentas bancarias».
A pesar de esta problemática, Bancos de Alimentos como el de Sevilla han podido abastecer sus almacenes para el verano, con lo cual esperan poder «atender la demanda de alimentos hasta septiembre» un mes en el que «confían que se reanude la actividad en cuanto a donaciones para poder reponerse de estos meses», un periodo en el que deben sustentar su actividad a través de contribuciones recurrentes de voluntarios y de algunas empresas.
Asimismo, Arteaga ha lamentado la situación provocada por la subida generalizada de los precios que está afectando sobremanera al costo de la cesta de la compra, aduciendo que «es una cuestión que nos está haciendo mucho daño, ya que los alimentos se están encareciendo un 20% de media». Este factor genera que la conversión de las donaciones económicas en alimentos «terminen siendo más caras por lo que conseguimos menos kilos de comida».
Es por ello que la inflación hace que las organizaciones tengan que apelar a la movilización ciudadana, a las empresas y a las instituciones públicas para poder ayudar a muchas familias que, debido a la tesitura económica actual, no llegan a fin de mes.
Este contexto contrasta con la realidad de los Bancos de Alimentos andaluces a lo largo del año, que llevan a cabo iniciativas como la ‘Operación Kilo’. Esta campaña consiste en diferentes acuerdos con cadenas de supermercados y tiendas para realizar recogidas de productos durante los fines de semana ,»movilizando a nivel andaluz a más de 15.000 voluntarios que se desplazan a alrededor de 2.000 establecimientos para informar a los clientes de las diferentes maneras de colaborar y que «han conseguido más de un millón de kilos de alimentos», ha subrayado el presidente.
A su vez, los Bancos de Alimentos andaluces surten de recursos a los comedores sociales de la comunidad, en la cual existen a día de hoy «más de 120» según Francisco Arteaga. En Sevilla, a nivel local, existen alrededor de 14 comedores, mientras que en términos provinciales se encuentran otros servicios como casas de acogidas donde también se facilita la alimentación.
